La detención de un niño afroamericano de ocho años con discapacidad que ha conmocionado a EEUU
La detención de un niño afroamericano de ocho años con discapacidad que ha conmocionado a EEUU
El abogado de la familia ha anunciado que demandará a la ciudad
La familia de un niño con discapacidad que fue arrestado cuando tenía 8 años en una escuela de Cayo Hueso (Florida) presentará una demanda contra la ciudad, ha anunciado este lunes su abogado, Ben Crump, que ha divulgado un vídeo donde se ve al policía bregando para ponerle las esposas porque es demasiado pequeño.
Las redes sociales han explotado con el vídeo y varias personas se preguntan e dónde está la ayuda terapéutica al menor en vez de la opción policial de recluirlo en un centro de detención del condado de Monroe, donde se encuentran los Cayos de Florida, un rosario de islas en el extremo sur del estado.
El vídeo, de hace dos años, ha sido hecho público hoy por el abogado Crump, conocido por representar varios casos de afroamericanos sometidos a discriminación o abuso policial, como el de George Floyd, muerto en mayo a manos de un policía blanco en Minesota, lo que provocó una ola de protestas en todo Estados Unidos.
Crump ha anunciado en un comunicado que presentará una demanda contra la ciudad de Cayo Hueso, el distrito escolar del condado de Monroe y los agentes a cargo del arresto, en representación de la madre del menor, Bianca Diegennaro. "Pese a que no significaba ninguna amenaza para los agentes ni para el personal de la escuela, el menor fue puesto en el asiento trasero de un vehículo policial, llevado a un centro de detención y acusado del delito de agresión", se lamentó Crump.
"Con 3,5 pies de alto (1,07 metros) y 64 libras (29 kilos) de peso, este pequeño no representaba peligro para nadie", ha resaltado.
El abogado ha explicado que, pese a que el niño estaba en un Programa Individualizado de Educación (IEP) porque padece discapacidades, fue dejado a cargo de una maestra sustituta que "no sabía o no le preocupaban" sus necesidades especiales.
Ha detallado que la maestra lo forzó a moverse a donde ella quería, a lo que el menor respondió con agresividad. La docente sustituta llamó entonces a la policía, que amenazó al niño con la cárcel y le dijo que tenía un problema muy serio.
"Este es un ejemplo angustioso de cómo nuestro sistema y nuestras políticas educativas entrenan niños para ser criminales tratándolos como criminales. Si es condenado este niño será un criminal convicto a los 8 años", denuncia Crump.