La batalla entre la Thermomix y el robot de cocina de Lidl llega a los tribunales: los jueces decidirán si se ha infringido la patente
De la cocina a los juzgados. El grupo alemán Vorwerk, fabricante de la Thermomix, ha llevado a juicio a la cadena Lidl por su robot de cocina Monsieur Cuisine Connect, con características similares y un coste hasta tres veces inferior.
El juicio se celebrará esta semana en el juzgado mercantil nº5 de Barcelona, en tres sesiones donde se escuchará a los peritos de Lidl y Vorwerk sobre la patente de su robot de cocina. El grupo Vorwerk dispone de la patente europea y española sobre la “máquina de cocina” y considera que Lidl la ha infringido. Por ello, el fabricante de la Thermomix exige una indemnización por daños y perjuicios del 10% sobre el importa bruto de la cifra de ventas del robot de Lidl.
No es la primera vez en los juzgados para la Thermomix
Según describe El Mundo, Lidl niega que su robot de cocina infrinja la patente de la Thermomix y pide la nulidad de la patente de Vorwerk por “falta de novedad, de actividad inventiva y por adición de materia”, además de considerar improcedente la indemnización reclamada. En respuesta a Xataka, desde Lidl contestan que prefieren “no hacer valoraciones sobre procesos judiciales”.
Patente de la Thermomix. Imagen: Google Patents En 2013, la patente de la Thermomix llevó a la española Taurus ante los tribunales, ante el mismo juzgado nº5 de Barcelona. Entonces la patente describía el robot de cocina como un dispositivo donde “la función de batido sólo pueda activarse cuando la temperatura de calentamiento ha sido programada por debajo de un límite”.
En aquel caso, el Tribunal Supremo desestimó el recurso de Vorwerk y otorgó a Taurus la legitimidad de fabricar y vender sus robots MyCook.
El pasado mes de junio, el robot de cocina de Lidl, Monsieur Cuisine, se agotó en 72 horas vendiendo más de 40.000 unidades a través de su página web.
El Monsier Cuisine no es igual que una Thermomix, pero su precio es menos de la mitad. Desde su llegada al mercado en su modelo básico hace seis años, han vendido más de 120.000 unidades y se ha convertido por derecho propio en uno de los robots de cocina más populares.
El robot de Lidl es fabricado por la marca Silvercrest, aunque es la empresa Hoyer quien se encarga de diseñar el dispositivo. Sin embargo, desde estas dos empresas tratan de esquivar las preguntas sobre el origen real del robot. El control de calidad es lo único que se realiza en Alemania, apuntando su diseño y producción a China y Hong Kong. No son los únicos, pues el propio fabricante de Thermomix decidió trasladar a China parte de su producción.
En respuesta a Xataka, desde Vorwerk explican que “el análisis constante del mercado y la protección de patentes de nuestros productos y servicios son esenciales”, añadiendo que se reservan “el derecho de emprender acciones legales contra las posibles infracciones de patentes o marcas registradas”. Aunque por el momento, no tienen “más detalles que comentar”.
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La batalla entre la Thermomix y el robot de cocina de Lidl llega a los tribunales: los jueces decidirán si se ha infringido la patente
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Xataka
por
Enrique Pérez
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